sábado, 12 de diciembre de 2015
POSIBLE SOLUCIÓN A LA PROBLEMÁTICA
Sabiendo pues que: Las obligaciones morales están lejos de ser originadas en la autoridad o en el castigo sino más bien sujetas a la presión de nuestra razón, para responder a el cuestionamiento que se hace de cuál podría ser una posible solución al problema social de la obligación moral voy a poner un ejemplo: Mi madre es una mujer sumamente entregada a su religión católica, ella sin falta acude a la iglesia todos los domingos pero el próximo domingo no puede asistir porque mi padre está de viaje, no tenemos empleada y tiene que atender a su nieto que tiene gripe, por lo tanto ella sabe que está dispensada de ir a misa, a pesar de ello mi mamá dice que no puede dejar de ir a misa porque estaría cometiendo un pecado, es decir en su corazón siente culpabilidad.
Al igual que el anterior ejemplo de obligación moral, todas las obligaciones morales que existen se rigen de esa forma; mejor dicho van sujetas a lo que nuestra razón nos dice que debemos hacer.
Por lo tanto una solución, aunque difícil, sería que los seres humanos intentáramos actuar de acuerdo a lo que consideramos correcto para nosotros mismos, es decir en el caso de mi mamá, debería repensar y entender que por un día que no acuda a la iglesia no va a cometer ninguna falta grave.
Los seres humanos y las diferentes culturas a las que pertenecen, han sido educados de acuerdo a parámetros fijados por las mismas y esto les impide realizar cosas de acuerdo a su forma libre de pensar, por ello y sin dejar de obrar adecuadamente propongo un repensar de los actos y sobre todo hacer lo que queramos y creamos correcto.
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